sábado, 10 de junio de 2017

Los Grey - Capítulo 31 - Encuentro familiar

Acababa Christian de llegar al despacho, cuando Andrea le pasó una llamada de un tal señor Lynch.  En un primer momento no creyó conocer al mencionado señor, después recordó que ese es el apellido de Amie.



- Pasémelo, Andrea, por favor. Buenos días, señor Lynch, ¿ a qué debo su llamada ?
- Verá señor Grey...  He estado pensando sobe todo lo que hemos hablado, y, creo que tiene razón.  Mi hija debe estar en su casa, y no es que no le agradezca el que la hubiera acogido, nunca le daré las gracias suficientemente, pero...  es mi hija, la queremos, y la echamos de menos.  Tanto ella como su hijo, serán bien recibidos en mi casa.  Y disculpe mi actitud del otro día; estaba furioso y desconcertado.
-Señor Lynch, no tiene porque justificarse.  Yo tengo una hija, y creo que me hubiera enfurecido si hubiera venido con esa noticia.  Les pasaré su encargo, si es que no desea hacerlo usted directamente
- Creo que tiene razón. Llamaré cuando esté en casa
- No es necesario.  Hágalo ahora, aquí.  Ella se lo agradecerá.  No cuelgue, voy en su busca.

Christian llamó a Ross solicitándola que enviara rápidamente a Amie.  Y así lo hizo.  Cuando llegó al despacho de Christian, la muchacha estaba extrañada y confusa

- Pasa. Tú padre está al teléfono.  Ha llamado él.  Os dejo solos para que habléis. No te alarmes, es algo bueno -.  Christian salió del despacho para que ellos pudieran hablar con libertad.  Salió sonriendo y moviendo la cabeza satisfactoriamente.


-Estoy en cafetería, Andrea. Llámame al privado si me necesitáis
- Asi sera, señor Grey -.  No quiso llamar a su hijo y comunicarle la buena noticia.  Creyó que debía ser Amie quién lo hiciera, y silbando bajó a tomarse un café.

Todo parecía que volvía a ser normal en la casa Grey, pero fue Phoebe, quién esa noche deseó hablar con sus padres

- Papá, mamá, hemos tenido una semana algo agitada en esta casa, y por primera vez, he tomado nota de todo lo ocurrido.  He comprendido lo que tantas veces me habíais dicho y yo no veía.  Me pongo en el lugar de Amie, y me pregunto  y ¿si hubiera sido yo ?
 -Hija mía, si hubieses sido tú, te habrías llevado una buena bronca, tu y tu novio, pero no hubiera pasado de ahí.  Pero es bueno que recapacites y que comprendas que las cosas no son como crees.  Esta es la vida real, lejos de las novelas y del cine.  Estas son las cosas que ocurren a destiempo, pero si suceden, ten por seguro que nunca te veras en la calle.
-Papá, he pensado trabajar en tu compañía.  No me gusta estudiar, y pienso que aprenderé más trabajando a tu lado,  que en una universidad, sacando a remolque unos estudios que no me gustan
- ¿ Y con qué fin has tomado esa decisión ?
- Con el fin de casarnos en cuanto Bryan termine la carrera. Su padre le ha prometido un puesto en su bufete, no ganará mucho en principio, pero con su sueldo y el mio, pienso que podremos vivir cómodamente.
 ¿ Lo has hablado con él ?
- Lo hemos hablado y está conforme
- Tenemos que decidirlo mamá y yo, así que mañana te responderé.

 Christian recordó cuando planteó eso mismo a  Carrick y la respuesta que obtuvo,  que no fue favorable   ¿Y si Phoebe estuviera dotada para los negocios? Tenía que estudiar su propuesta, que a simple vista no era tan descabellada.



Después de que Amie terminara de hablar con su padre.,esperó a que Chistian llegara de la cafetería y le agradeció su intervención para la feliz resolución del problema planteado. El señor Lynch había invitado a Teddy a comer ese domingo, algo que satisfizo grandemente a Christian: parecía que todo estaba solucionado.  Habría que pensar en el compromiso de los chicos.  Lo hablaría con Ana y después lo consultaría con su futuro consuegro.

¡ Teddy casado y a punto de ser padre !  Adoraba a sus hijos, a los tres, pero con Teddy... es como si llevara sobre su conciencia el rechazo a su nacimiento en un principio.  Nunca se lo perdonaría.    Dentro de unos meses, le haría abuelo primerizo.  Y se veía con un bebe en brazos, cuando a penas hace unos meses sostenía entre ellos  un nuevo hijo que le llenaba de orgullo y satisfacción.  El tiempo pasa veloz, y antes de que se den cuenta, tendrán nuevamente a un adolescente dando problemas.  Para, para, Christian, el niño sólo tiene unos meses


 La recepción de Amie y Teddy en casa de los Lynch, fue cordial, como si nada hubiera pasado. Teddy solicitó permiso a su padre para la petición de compromiso y fue aceptado. Se pusieron de acuerdo que en un par de semanas, acudiría con su familia a esa casa para la petición.   Al despedirse de los padres de Amie, después de dejar a su novia en su casa, el señor Lynch, llamó aparte a Teddy, y tomándole de un brazo le dijo.

- Tu padre es un buen hombre.  Siempre le estaré agradecido del trato dispensado a mi hija.Debes estar orgulloso de él
- Lo estoy, señor. Lo estoy.  Es noble y generoso; ya tendrá ocasión de comprobarlo

 Y el plazo se cumplió.  Christian encargó un anillo, siguiendo las indicaciones de Teddy,  para poner en el  dedo de Amie, que había recuperado la sonrisa..  A la casa de los Lych, acudió al completo el clan Grey, Bryan, que llevaba en brazos a su futuro cuñado el bebé Grey, así como los abuelos Grey Trevelyan.  Grace por nada del mundo se lo hubiera perdido.Su primer nieto iba a comprometerse, no podía faltar.  La reunión fue amable y sin protocolos. Chistian, Lynch y Carrick, charlaban animosamente, como si se conocieran de toda la vida. Amie sostenia en brazos a su cuñado que a la vez sería tío de su hijo, aunque la diferencia de edad, fuese poco más de un año.  Las mujeres aparte, charlaban de sus experiencias, y resultó que Grace había traído al mundo a  Amie, durante sus últimos años en ejercicio de su profesión. Ellas reían y extrañó  a los hombres lo que se contarían que les proporcionaba semejante hilaridad.  Ana y la señora Lynch, sentían una especial complicidad.  Amie contó a sus padres el trato exquisito que habia recibido de esa familia mientras estuvo en su casa


Los padres de Amie se emocionaron, cuando Teddy puso en su dedo el anillo de compromiso, acompañado de unas sentidas palabras de amor.  Era el primer amor de cada uno de ellos. Amie le regaló unos gemelos de oro, que llevaría el día de su boda

El encuentro terminó tarde y el hijo más joven de Chrstian  protestaba ante tanto alboroto de risas y de brindis, algo en lo que él no participaba.  Sólo quería su biberón y su cunita cómoda y calentita.  Al despedirse, quedaron para volverse a reunir todos en una comida, pero ésta vez en casa de Grey. Ya eran miembros de su familia y como tal tendría que conocer a todos.  A la misma asistirían Los hermanos de Chistian y sus hijos, José padre e hijo y por supuesto Ray.  Nuevamente Christian se rodeaba  de todos los suyos, de su gran familia unida y gregaria.

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