Ningún miembro de su familia esperaba que Alexander se presentara con una joven. Nuca lo había hecho. Conocían sus andanzas de faldas, pero, desde su rompimiento con su novia de siempre, ninguna chica había frecuentado la casa de sus padres. Les recibieron con sorpresa y alegría; veían un resquicio para que nuevamente volviera a enamorarse y de nuevo tuviera una vida no tan solitaria como la que ahora tenía.. Como dos torbellinos acudieron sus sobrinos para abrazar a su tio Freddy y Charlotte, dos diablillos hijos de su hermana Stella y de Fred, su cuñado. Nunca había hablado a Alyssa de su familia; solamente había nombrado de pasada a sus padres, pero nunca mencionó que tuviera una hermana casada y con dos hermosos hijos. Era mayor que él, pero nada más verles juntos, se notaba la complicidad entre ellos. A simple vista se podía ver que era una familia armónica con cariño y respeto entre ellos.
Las presentaciones fueron amables y enseguida hicieron que Alyssa se sintiera cómoda. La hermana de Alex la trató con cariño e hizo que participara junto a su madre en ordenar la mesa y disponer todo para un aperitivo, mientras los hombres se encargaban de la barbacoa. Los niños correteaban por el jardín alegremente. Toda una nota de color en el paisaje familiar, que agradó en gran manera a Alyssa
Hablaron de distintos temas y supieron que ambos trabajaban en la misma compañía, es decir que él era el jefe de ella, aunque su amistad se iniciara casualmente, hasta desembocar en la relación que ahora mantenían La madre observaba al hijo detenidamente, y vio con qué ojos miraba a la muchacha y la sonrisa que ella le dedicaba. Sonrió sutilmente, imaginando que ambos sentían algo el uno por el otro, aunque, quizá ellos ni siquiera se dieran cuenta de sus sentimientos. La gustaba Alyssa; era bonita , educada y simpática ¿ sería ella la que por fin llenase la vida de su hijo?
A media tarde se despidieron, ya que debían regresar y Alex no quería que se les hiciera de noche en carretera.
- Vuelve otro día - la dijo la madre- Hemos pasado una tarde fantástica. Me agrada que me hijo te haya traído
-Yo también lo he pasado estupendamente y me he sentido muy cómoda. Prometo volver otra vez, si Alexander me trae.
Se abrazaron cariñosamente, al igual que a Alex, que tomando su cara entre las manos, su madre, le miró por unos instantes detenidamente, buscando en sus ojos alguna señal de lo que ella deseaba e imaginaba.
Iban en silencio. Mientras tomaban la carretera, Alyssa le dijo:
- Nunca me habías hablado de tu familia. Son encantadores; lo he pasado muy bien. Tienes unos sobrinos preciosos. Toda la familia es encantadora. Tienes suerte de tenerles.
- Es cierto. Son cariñosos y comprensivos.
No sabía por qué lo hizo, ni a qué se debía aquella pregunta, pero de repente sintió la necesidad de saberlo. El haber pasado el día con la familia le había hecho comprender que Alex significaba algo más, que no era una simple amistad, que todo había ocurrido sin darse cuenta, ni haberlo buscado. Por eso, de improviso, le dijo:
- Para el coche en cuanto puedas, quiero preguntarte algo
-¿ Te encuentras bien? ¿ Sientes algún mareo ?.-dijo preocupado él:
- No, no. Es que quiero preguntarte algo
Hablaron de distintos temas y supieron que ambos trabajaban en la misma compañía, es decir que él era el jefe de ella, aunque su amistad se iniciara casualmente, hasta desembocar en la relación que ahora mantenían La madre observaba al hijo detenidamente, y vio con qué ojos miraba a la muchacha y la sonrisa que ella le dedicaba. Sonrió sutilmente, imaginando que ambos sentían algo el uno por el otro, aunque, quizá ellos ni siquiera se dieran cuenta de sus sentimientos. La gustaba Alyssa; era bonita , educada y simpática ¿ sería ella la que por fin llenase la vida de su hijo?
A media tarde se despidieron, ya que debían regresar y Alex no quería que se les hiciera de noche en carretera.
- Vuelve otro día - la dijo la madre- Hemos pasado una tarde fantástica. Me agrada que me hijo te haya traído
-Yo también lo he pasado estupendamente y me he sentido muy cómoda. Prometo volver otra vez, si Alexander me trae.
Se abrazaron cariñosamente, al igual que a Alex, que tomando su cara entre las manos, su madre, le miró por unos instantes detenidamente, buscando en sus ojos alguna señal de lo que ella deseaba e imaginaba.
Iban en silencio. Mientras tomaban la carretera, Alyssa le dijo:
- Nunca me habías hablado de tu familia. Son encantadores; lo he pasado muy bien. Tienes unos sobrinos preciosos. Toda la familia es encantadora. Tienes suerte de tenerles.
- Es cierto. Son cariñosos y comprensivos.
- Para el coche en cuanto puedas, quiero preguntarte algo
-¿ Te encuentras bien? ¿ Sientes algún mareo ?.-dijo preocupado él:
- No, no. Es que quiero preguntarte algo
Alex, buscó un lugar donde poder aparcar el coche. Una vez hecho ésto, se volvió hacia ella intrigado por lo repentino de la petición
- Y bien, dime lo que quieras- dijo Alex
- Verás... Llevamos tiempo tratándonos desde lejos, pero poco que nos conocemos y, sólo hemos salido en un par de ocasiones. Lo de hoy ha sido un extraordinario que no sé cómo calificar y estoy algo confundida. ¿ Yo te gusto, me encuentras atractiva ?
Él se la quedó mirando sin entender muy bien a qué venía aquella pregunta. ¡ Naturalmente que le gustaba ! Mucho, muchísimo, pero siempre había guardado las distancias porque ella no consideraba adecuado su relación por ser el jefe
- ¿ Por qué me lo preguntas? ¿ Te he violentado en algo, te he hecho sentir incómoda ?
- No, no.. Es que hoy.. me he sentido ... especial. Posiblemente ha sido porque echo de menos a mi familia y hasta hoy no me había dado cuenta de que mi vida está vacía. Y que deseo que llegue la mañana para tomar contigo un simple café antes de ir al trabajo. Y no termino de comprender lo que me ocurre, sólo sé que cuando no nos vemos te echo de menos y mi día es distinto. Nunca me había sucedido, con nadie. Posiblemente sea porque tú me das paz y tranquilidad, no lo sé. Pero no me gusta, porque me inquieta y me vuelve insegura ante esto que siento y que desconozco.
-Sé lo que te ocurre, porque es lo mismo que yo siento. Sencillamente nos hemos enamorado. Conectamos a la perfección. Estamos a gusto juntos. parecerá una locura que en tan poco tiempo tengamos este sentimiento, pero no le des más vueltas. Es algo que ocurre y esta vez nos ha ocurrido a nosotros, a los dos a un tiempo. A mi no me inquieta en absoluto, sólo si tú por el motivo que sea, me rechazas. Entonces lo sentiría y volvería a pasar por algo que no deseo. No debes estar ni inquieta ni intranquila. Yo estoy contigo-
Se miraron largamente a los ojos, como queriendo buscar la comprensión en el otro. Fue Alyssa la que acercó su mano hacia el rostro de Alex y se inclinó sobre él, depositando un suave beso en sus labios. No necesitó más respuestas ni más preguntas, al sentirse abrazada fuertemente por él, y besada por él, correspondido por ella. Todas las palabras estaban de más. Ambos habían descubierto lo que en realidad deseaban, lo que en realidad sentían el uno por el otro, y que hasta entonces sólo creyeron que era una buena amistad, cuando en realidad era que se necesitaban mutuamente y acababan de descubrirlo.
- Tenemos que irnos - dijo él, tratando de averiguar qué era lo que en realidad ella deseaba
- Lo sé. ¿ Tú deseas lo mismo que yo ? - le preguntó sin aclarar más.
Él, indeciso, no sabía cómo interpretar aquella respuesta. Temía que si le hacía alguna proposición de estar juntos, ella respondiese airadamente y sería una ruptura . Deseaba explorar sus reacciones, y entonces dijo, a sabiendas de que era una forma de ver lo que ella quería decir
-No sé a qué te refieres, pero si es lo que imagino, sí, lo deseo- respondió él
- Pues entonces, llevame a donde quieras. Lo que deseo es que estemos juntos ¿ me entiendes?
- ¡ Claro que te entiendo ! lo he pensado desde un principio, pero no sabía como reaccionarías.
- Y bien, dime lo que quieras- dijo Alex
- Verás... Llevamos tiempo tratándonos desde lejos, pero poco que nos conocemos y, sólo hemos salido en un par de ocasiones. Lo de hoy ha sido un extraordinario que no sé cómo calificar y estoy algo confundida. ¿ Yo te gusto, me encuentras atractiva ?
Él se la quedó mirando sin entender muy bien a qué venía aquella pregunta. ¡ Naturalmente que le gustaba ! Mucho, muchísimo, pero siempre había guardado las distancias porque ella no consideraba adecuado su relación por ser el jefe
- ¿ Por qué me lo preguntas? ¿ Te he violentado en algo, te he hecho sentir incómoda ?
- No, no.. Es que hoy.. me he sentido ... especial. Posiblemente ha sido porque echo de menos a mi familia y hasta hoy no me había dado cuenta de que mi vida está vacía. Y que deseo que llegue la mañana para tomar contigo un simple café antes de ir al trabajo. Y no termino de comprender lo que me ocurre, sólo sé que cuando no nos vemos te echo de menos y mi día es distinto. Nunca me había sucedido, con nadie. Posiblemente sea porque tú me das paz y tranquilidad, no lo sé. Pero no me gusta, porque me inquieta y me vuelve insegura ante esto que siento y que desconozco.
-Sé lo que te ocurre, porque es lo mismo que yo siento. Sencillamente nos hemos enamorado. Conectamos a la perfección. Estamos a gusto juntos. parecerá una locura que en tan poco tiempo tengamos este sentimiento, pero no le des más vueltas. Es algo que ocurre y esta vez nos ha ocurrido a nosotros, a los dos a un tiempo. A mi no me inquieta en absoluto, sólo si tú por el motivo que sea, me rechazas. Entonces lo sentiría y volvería a pasar por algo que no deseo. No debes estar ni inquieta ni intranquila. Yo estoy contigo-
- Tenemos que irnos - dijo él, tratando de averiguar qué era lo que en realidad ella deseaba
- Lo sé. ¿ Tú deseas lo mismo que yo ? - le preguntó sin aclarar más.
Él, indeciso, no sabía cómo interpretar aquella respuesta. Temía que si le hacía alguna proposición de estar juntos, ella respondiese airadamente y sería una ruptura . Deseaba explorar sus reacciones, y entonces dijo, a sabiendas de que era una forma de ver lo que ella quería decir
-No sé a qué te refieres, pero si es lo que imagino, sí, lo deseo- respondió él
- Pues entonces, llevame a donde quieras. Lo que deseo es que estemos juntos ¿ me entiendes?
- ¡ Claro que te entiendo ! lo he pensado desde un principio, pero no sabía como reaccionarías.
`.¿Quieres venir a mi apartamento ó prefieres otro lugar?
- No, tu apartamento.
- Estás segura
- Si lo estoy y lo deseo - . Le beso ligeramente y él sonrió feliz
Comenzaba algo feliz con la esperanza de que ambos no se sintieran defraudados por anteriores relaciones fracasadas. Esto que sentían era diferente para ambos. Alex puso nuevamente el coche en marcha y se dirigieron a su apartamento; allí pasarían una noche inolvidable de amor recién estrenado y conocido. . Ignoraban lo que les había ocurrido en ese día, pero tampoco se pararían a averiguarlo: había sucedido y con eso tenían bastante.
Y esa noche se amaron plenamente como si fuera la primera vez que cada uno de ellos tuviera esa sensación. Se abría una nueva etapa en sus vidas totalmente desconocida para ellos, pero que no dejarían escapar.
Reclinada ella, sobre el pecho de él, escuchaba como la canturreaba bajito al oído
- No, tu apartamento.
- Estás segura
- Si lo estoy y lo deseo - . Le beso ligeramente y él sonrió feliz
Y esa noche se amaron plenamente como si fuera la primera vez que cada uno de ellos tuviera esa sensación. Se abría una nueva etapa en sus vidas totalmente desconocida para ellos, pero que no dejarían escapar.
Reclinada ella, sobre el pecho de él, escuchaba como la canturreaba bajito al oído
una balada dulce y amorosa. Ella callaba y sonreía, feliz de aquel primer encuentro y sentía que aquella ternura que él desprendía la llenaba por completo, algo que nunca hubiera imaginado cuando le vio por primera vez en el aeropuerto frente a ella con una bandeja de desayuno entre las manos. Ni siquiera entonces sospechó que era su jefe, del que se enamoraría perdidamente en unos pocos días, y que él la correspondía de igual medida. Y que hoy había conocido a su familia. ¿ Se lo pediría él porque quería que la conociera, o fue algo casual que surgió? Daba igual por el motivo que fuera, el caso era que estaban allí, juntos y que se habían amado e iniciado una relación muy distinta hasta la que entonces habían mantenido, pero era maravillosa y veía las cosas bajo otro prisma totalmente diferente. Bajo el prisma del amor. recién descubierto, pero no por eso menos intenso.
RESERVADOS DERECHOS DE AUTOR / COPYRIGHT
Autora< rosaf9494quer
Edición< Enero 2018
Ilustraciones< Internet
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